La cita

Cuando te pienso, pienso en el cielo.
Cuando te tengo estoy en el cielo.

Cuando me besas, siento colores.
Cuando te abrazo olvido temores.

Cuando me tocas, siento la vida.
Cuando me miras veo mi vida.

Cuando te alejas, pierdo mi norte, no hay primavera, mueren las flores.
Cuando te vas, mi camino es un río, no hay salvavidas, me hundo en el frío.

¿Que no daría por caminar tomados de la mano? como aquellos años, tiempos olvidados.

¿Que no daría por empezar de nuevo? tu y yo, los niños y el perro.

¿A quién le importa?

Chaz,

Nunca pensé que estaría escribiendo esto, no pensé que llegaría a llorar tanto por alguien a quién nunca pude abrazar, no es justo que no estés en el mismo lugar que nosotros. Sé que no querías irte, lo sé muy dentro de mi  y no soy la única que lo piensa, uno NUNCA desea irse en realidad, pero a veces hay tanta oscuridad que no logramos ver con claridad lo que está a nuestro alrededor.

La primera vez que escuché tu banda tenía 9 años y mi hermano 4, recuerdo que cuando tenía 12 años encontré la letra de "Breaking the Habit"  y junto a mi tío, quién era fanático de Linkin Park intentamos traducir la canción para poder entender un poco más de qué iba... Hoy día me cuesta creer que exactamente esa canción significaba mucho para ti, y que, finalmente le encontré sentido.

Es increíble que, con el pasar de los años solo cerraba los ojos y dejaba que tu voz entrara por mis oídos, podía sentir cómo peleabas con tu dolor en cada canción, en cada línea, en cada grito.

Y es precisamente eso,  tu voz la que salvó y sigue salvando más vidas de lo que te imaginas, personas que nunca llegaron a ver tus ojos de frente sienten que han perdido a un íntimo amigo, hablan contigo a diario. Otros han decidido buscar ayuda a sus problemas para honrarte, los entiendo, yo siento que perdí a un ser querido.

Y es que, ¿cómo no quererte, Chaz?  Si tenías un corazón enorme y  un talento mágico, y a pesar de que tu vida fue dura, siempre fuiste amable con cada persona que conociste, dejaste tu huella, dando lo mejor de ti en cada situación, mejorando la vida de muchas personas... fuiste genuino, y eso es muy escaso en este mundo.

No sabes cuánto hubiese querido ayudarte a cargar con ese peso, porque era demasiado para ti, tampoco sabes lo mucho que deseaba darte un abrazo... Pero me consuela el hecho de que te he visto en mis sueños, en todos ellos estás sonriendo y nos presentamos, aunque curiosamente yo sé muy bien quién eres.

Me gusta pensar que te liberaste de todo sufrimiento y que por fin estás en Paz, que tu alma se encuentra en Talinda, en Tyler, Draven, Lily, Lila, Isaiah, Jaime, en tus amigos y en todas aquellas personas que por una u otra razón te queremos.

Has cambiado mi vida, y en cierta manera la de mi familia, gracias a ti he podido comprender mejor algunas cosas, me he trazado metas, he tomado decisiones de suma importancia y he mejorado como persona, estoy aprendiendo a  valorar cada detalle que me brinda la vida y a llevar un día a la vez. Quizá algunos al leer esto pensarán que exagero, que, cómo es que alguien como tu ha tenido ese impacto en mí y no mi propia familia, mi propia madre, padre o hermano.. Para ellos sólo puedo decirles que algunas veces, entre millones de personas, a miles de Kilómetros, hay alguien que sin siquiera conocerte, te entiende perfectamente y posee las palabras adecuadas para ti, ese es mi caso, el tuvo el poder de describir algo que yo jamás hubiese podido.

Por eso y mucho más, estaré eternamente agradecida contigo, sé que podremos coincidir en otra vida... hasta pronto Chester,  siempre serás amado.

P.D: a mi.

Incompleto.

Muchas cosas cambian cuando pierdes al amor de tu vida, te cambia el ánimo, el apetito y hasta la manera de caminar.

Los días se dividen en dos categorías, esos donde el ruido de tu cabeza es más fuerte que el silencio, luego están esos días donde lo menos que deseas es ese silencio, pues temes escuchar cómo te quiebras por dentro.

 El sol que antes recibías en la ventana ahora te molesta,  la lluvia que disfrutabas mientras daban un paseo te deprime más, la flor colorida que le enseñaste un día, hoy te estorba...Piensas en que dichosa es la gente que puede verle, que puede intercambiarle unas palabras, piensas mucho en la suerte tendrán las personas que llegarán a conocerle, sobre todo la persona que logre despertarle amor de nuevo...  Te cuestionas tantas cosas que no puedes responder, que no puedes o podrás entender... Pero también aprenderás.

Se aprende que llorar es necesario, no importa cuánto y mucho menos donde, como cuándo tienes náuseas, hasta que no lo saques todo no te sentirás mejor. También, sé que no se llena ese vacío en el corazón con alcohol o con cualquier otra cosa, eso está muy lejos siquiera de liberar la presión que sientes dentro, sólo es fuego cuando eres Gasolina.


Aprendes que cuando amas a alguien, la ves en todas partes, en películas, en chistes,en colores, la sientes en canciones, lugares y está presente hasta en olores, no puedes olvidarle y extrañas contarle de tu día y escuchar cómo le fue, describirle un paisaje, sentir que aún sigue allí, por ti, quieres volver a tener una oportunidad de discutirle algo, aunque sea por última vez, incluso si por dentro sientes  impotencia, no porque le odies, sino porque no puedes hacer nada para solucionarlo...Allí entiendes lo que John Green expresó alguna vez: "Puedes amar mucho a alguien, pero nunca podrás amarla más de lo que puedes extrañarla".

Sin embargo, lo más importante que he podido aprender es que está bien rendirse ante ciertos eventos que se nos presentan en la vida, no porque seamos débiles, al contrario, eso nos hace más valientes al aceptar que no podrá ser como alguna vez quisimos. Está bien darlo todo por perdido, es tan válido como ser un eterno optimista, y puede que incluso duela mucho menos. Está bien sentir que mueres, está bien quedarte en el piso y no levantarte, está bien estar mal.

Porque luego de eso, llegará un alivio, por supuesto que si, algún día llegará y conocerás tan bien el dolor que no te permitirás gastar más tiempo para sentirlo de nuevo, claro está, nunca volverás a ser el mismo, pero así es la vida, a veces se gana, otras se pierde.

Juventud

Desde que te conocí, todo ha sido sobre ti.

Las madrugadas empezaban con tu mano sobre la mía  y continuaba en una eterna travesía entre tus dedos y mi espalda, todo tan irreal, hasta tocar la delgada línea entre un sueño y la realidad.

De las madrugadas junto a ti, aprendí muchas cosas, pero las importantes son:

Si hay amor, dos caben en un sillón.
 Y el ruido más agradable siempre será el tic tac de tu reloj, pues me recordaba que tu cuerpo encajaba perfectamente con el mio, como si estuviesen destinados a conocerse una y otra vez.

Y eso, era felicidad, tal como me dijiste alguna vez, y es que era imposible imaginarse algo más perfecto que observar la Luna entre copas, bailes locos y nuestras canciones, pero tu tenías esa habilidad de sorprenderme, de hacer que lo próximo que viniese fuese incluso mejor, cada día superaba al anterior.

Las salidas espontáneas, eran como escenas de películas, nuestra sintonia no era de este mundo y allí comprendí cómo se sentía la armonía.
Ir de tu mano se convirtió en mi mejor motivo para ser feliz y nuestras conversaciones parecían no tener fin, cada día descubríamos lo distintos que éramos y a su vez, lo parecido que lográbamos ser.
Y entre tantos días y noches, hay algo que nunca, nunca revelé, y es que yo supe exactamente el momento en el que me enamoré:

Fue una tarde, donde aún no conocía tus labios, hablábamos de la radio y de lo mágico que eso podría llegar a ser, entre nuestras miradas y las inevitables coincidencias al hablar, rozaste tu mano con la mía y desde ese instante lo supe todo, supe que esto le daría sentido a mi vida. 

 y así fue como de los días junto a ti, aprendí muchas cosas, pero las más importantes han sido:

Amor es saber cómo le gusta el café.
Amor es tener la certeza para saber si algo no le agradará.
Amor es comprender silencios y que no sean incómodos.
Amor es calcular cuántos trenes deben tomarse para reencontrarse.
Amor es eso que descubrí, viviendo mis días junto a ti...

y no importa si estas lejos, muy muy lejos, 
Si tu memoria ha sido borrada, o si con suerte nada en tu corazón cambia,

porque acá siempre te seguiré amando... y es que, resumiendo todo, desde que te conocí, todo ha sido sobre ti.